En la jornada del día 4 de noviembre se celebró en el Edificio histórico de la Universidad de Oviedo. Aula “Rector Alas”, el proyecto desarrollado por Johnson & Johnson y organizado por EFE. “Tiempo y cáncer de próstata en Asturias: por un diagnóstico precoz”.

El programa comenzó a las 16;00 con la intervención institucional de apertura por parte de Dña. Mª Concepción Saavedra, consejera de Salud del Principado de Asturias.

Por parte de Johnson & Johnson D. David Beas, director de Government Affairs y Acción Social, habló de los retos y desafíos en cáncer de próstata.

La mesa Redonda “Hablemos de tiempo. Hablemos de próstata” estuvo representada por el sector médico asturiano:

Dr. Juan José Corte, jefe del Servicio de Farmacia Hospitalaria de la Fundación Hospital de Jove de Gijón.                                                                                                                         Dra. Arantzazu Iglesias, jefa del Servicio de Oncología Radioterápica de HUCA de Oviedo.                                                                                                                         Dr. Jesús María Fernández, jefe del Servicio de Urología del HUCA Oviedo.                        Dr. Emilio Esteban, jefe del Servicio de Oncología Médica del HUCA Oviedo.             D. Marcos Martínez, gerente del Grupo Español de Pacientes GEPAC                              D. Santiago Gómez, vicepresidente primero de la Asociación Nacional de Cáncer de Próstata ANCAP.

A la pregunta de la importancia de actuar a tiempo. Informo que actuar a tiempo es fundamental en la detección y tratamiento del cáncer de próstata. Es algo que puede marcar una gran diferencia en el pronóstico y la calidad de vida del paciente.                    El cáncer de próstata como una gran parte de los tumores malignos, no causa ninguna alteración perceptible por el paciente en las fases iniciales de la enfermedad.                      El cáncer de próstata tiene mucha prevalencia, en el año 2024 se diagnosticaron, 34.383 casos, pero también mucha expectativa de vida. De ahí, la importancia del diagnóstico precoz.

En ANCAP la importancia de actuar a tiempo lo hacemos trasladando mensajes a la sociedad como; pedir a todos los varones que, a partir de los 50 años con carácter general, y con 45 años en el caso de personas con antecedentes familiares, que realicen anualmente una analítica de sangre en la que se les solicite el parámetro PSA. Parámetro que le sirve al profesional de laboratorio determinar los niveles de PSA, y al especialista en urología poder evaluar y orientar al paciente.

Es importante atender estos mensajes porque las excelentes expectativas de vida si se diagnostica a tiempo, están avaladas por el Instituto Nacional de Cáncer de EEUU, que clasifica y agrupa a los cánceres en tres etapas diferentes: Local. Regional y Distante. La etapa local, hace referencia a que el cáncer todavía no se ha extendido fuera de la glándula prostática. Se estima que cerca de 4 de cada 5 (80%) cánceres de próstata se encuentran en esa etapa temprana. Y aquí, la tasa relativa de supervivencia a 5 años es aproximadamente del 100%.

En relación a la investigación en España, es una exigencia de la comunidad médico-científica, si bien los gobiernos de uno y otro color no consideran I+D una prioridad para nuestro país. España, pelea a la cola de Europa en cuanto al presupuesto destinado a I+D, muy lejos de países como: Israel, 4,9%. Corea del Sur, 4,5%. Japón. Alemania. Francia. Países Bajos en torno al 4%.

La noticia positiva es que nuestro país es líder en Europa con 930 estudios clínicos autorizados en 2024, datos del Registro Español de Estudios Clínicos. Un 37,6% de esos ensayos fueron con medicamentos destinados a tratar algún tipo de cáncer. Más de ocho de cada 10 ensayos clínicos que se realizan en España lo promueve la Industria Farmacéutica. España es el segundo país en el mundo preferido por el sector farmacéutico para llevar a cabo estos ensayos después de EEUU.

Aprovechemos el marco que nos ofrece este mes el “Movimiento Internacional Movember” para dar visibilidad a la salud masculina. Pues los hombres de media viven seis años menos que las mujeres por contingencias absolutamente prevenibles.